En Rivas, junto al camino de las lagunas del campillo se encuentra este asombroso paraje que bien podría servir de localización para cualquier película de cine.
Los puentes de Madison en versión madrileña. El puente verde de Rivas ha sido retratado por numerosos fotógrafos en sesiones. Y como buena buscadora de rincones secretos quería conocerlo.
Si tienes coche llegar hasta allí no te será difícil, solo tienes que dirigirte por la carretera de Arganda hasta la salida de Rivas y en la rotonda de entrada girar a la derecha.
Si pones en el gps «puente verde de Rivas» te llevará hasta el primer de los aparcamientos.

¿Dónde aparcar?
Cuando llegues verás muchos coches aparcados en el arcen, esto es porque es una ruta muy conocida y seguida por ciclistas y senderistas. Cuando la recorras sabrás porqué.
Sigue hacia delante hasta el aparcamiento de la fábrica o el merendero y aparca el coche allí. La carretera sigue, pero a partir de este tramo no está en muy buenas condiciones.
El merendero y la fábrica
El primer punto de nuestra ruta, ya es un paraje bastante llamativo para hacer fotos, recuerdo que al ver las primeras montañas y el tipo de roca dije…¡El monument Valley madrileño! en versión light, claro.
La zona de la fábrica con graffitis y parte de las vías abandonadas también está bien para sacar algunas fotos.De hecho cuando llegamos, había un grupo de gente con varias reflex jugando con la intensidad y la luz.
En la zona del merendero si utilizas algún modo landscape o wide puede quedarte una foto bastante chula.


El sendero hasta el puente verde
El sendero hasta el puente verde, dicho así parece la sinopsis de un mago de oz actualizado, pero el sendero que te lleva hasta el puente verde tiene rincones de auténtica belleza.
Supongo que las lluvias y las subidas de temperatura hicieron que algunos paisajes fueran propios casi de primavera, en mitad del camino nos volvemos a encontrar con otro monument valley madrileño y un campo de flores amarillas hasta donde no alcanza la mirada.
¿Al final va a ser verdad el sendero amarillo?
Como la cabra tira al monte allí fuimos, Nano hasta el momento era el que más estaba disfrutando de la aventura y es que le das un campo y flores y se convierte en la «temible abeja polinizadora»
Los contrastes amarillos con verdes y la piedra de la montaña hacen esta bonita postal.


El puente verde
Después de las fotos en este punto del camino, ya estaremos aproximadamente a unos 15 minutos del puente.
Para llegar a él solo tienes que ir siguiendo el tramo de vías que empezarán a surgir a tu derecha y subir por un pequeño sendero hasta el puente, no te preocupes lo verás a lo lejos.
Al llegar al puente, vimos un fotógrafo en plena sesión, pero el puente es tan grande que hay sitio para todos.
Lo bueno del día, es que al estar nublado, la gama de grises o de tonalidades de contraste se aplicaban de maravilla. El puente de verdad que me pareció una pasada, digno de cualquier localización de cine o de vídeo en 8mm.
Y el resultado de la sesión me dejó con ganas de volver, posiblemente en verano, en alguno de sus atardeceres que deben ser mágicos.
Aquí se puede jugar mucho con el color de la vía, pero cuidado con los escalones, no se te vaya a colar un pie dentro :-s
En cada tramo de tren verás una vía más ancha del mismo color del puente ese puede ser tu «favourite spot» para tomar todas las fotos que quieras, como si de Nueva York se tratara.
Lo que tienes que tener en cuenta es que ese tramo es transitado por bastantes ciclistas, así que tendrás que tener un poquito de paciencia a veces.



Al comienzo del puente según mires a tu derecha, verás un plano de las antiguas vías del tren que van desapareciendo por el camino, rodeadas de montañas al final.
Hace unos meses que hice la ruta 66 y no pude evitar sentirme un poquito teletransportada a ese paisaje.
Este punto de la ruta también fue de mis favoritos para tomar unas cuantas fotos.


Y hasta aquí nuestra ruta por el puente verde de Rivas…..
¡Hasta la próxima!